Este Viernes Santo el Arzobispo de México presidió la Liturgia de la Pasión del Señor en la Catedral Metropolitana.
“Como buenos y fieles discípulos de Jesús debemos preguntarnos con frecuencia: ¿Aprendo a descubrir la entereza de Jesús para enfrentar con valentía y confianza las infidelidades, las críticas sin sustento y las traiciones? ¿Y en esos momentos he percibido de qué manera Dios me acompaña?”
Estas fueron las dos preguntas que el cardenal Carlos Aguiar Retes, arzobispo primado de México, lanzó a los fieles reunidos la tarde de este Viernes Santo en la Catedral Metropolitana para participar en la Liturgia de la Pasión del Señor.
En su homilía, pronunciada previo al tradicional rito de la “Adoración de la Cruz“, el Sr. Arzobispo consideró que a veces, en lugar de buscar el ejemplo de Jesús para enfrentar las adversidades, solemos pensar como Judas.
“¿Cuántas veces no hemos pensado como Judas, que Dios debería intervenir con fuerza y poder para acabar con los malvados? ¿Cuántas veces nos hemos preguntado por qué Dios permite la maldad entre los hombres y por qué no interviene?”
Por ello, el cardenal Aguiar llamó a aprender de la actitud de Jesús, que es de plena confianza en la voluntad de su Padre, pues “de ahí recibió Jesús la fortaleza necesaria para afrontar con aplomo y serenidad la traición y la muerte”.
Previo a la Comunión, se llevó a cabo el rito de la Adoración de la Santa Cruz, en la que la cruz fue presentada ante la comunidad, para después ser venerada por los presentes, empezando por el Card. Aguiar Retes, y seguido por el rector de la Catedral, Pbro. Ricardo Valenzuela, algunos sacerdotes, diáconos y fieles laicos.